29 enero, 2007

PATAFISICA

COLEGIO DE PATAFISICA: "SOCIEDAD DOCTA E INUTIL DEDICADA AL ESTUDIO DE LAS SOLUCIONES IMAGINARIAS"...
A finales del Siglo XIX surge como un sputnik intelectual y humano, Alfred Jarry, inventor, o más bien precursor, del posterior surrealismo, dadaísmo o teatro del absurdo. Jarry es uno de los primeros artistas (luego vendrían Dalí y Warhol entre otros), que hacen de su propia actitud vital, sus gestos, su actos, todo un arte en sí mismo.
Actualmente estamos acostumbrados a una relativa transgresión en el arte, casi ya no nos sorprende nada ("ya nadie se of3ende por nada" decía hace poco en una entrevista Norman Mailer), sin embargo Jarry con sus comedias satíricas y burlescas (la primera representación de "Ubu Rey" terminó a tiros con el autor insultando al público y al revés), sus dos pistolas descargadas con las que la emprendía contra todo impostor artístico o intelectual, y sus exposiciones de "Agujeros, nadas y espejismos" sembró el germén (por un lado de las campañas de marketing basadas en el escándalo), y por otro, abrió en el mundo del arte, la puerta de la broma inteligente (Duchamp), del inconsciente encarnado (Breton), o del juego con el objeto artístico (el pop).
Su ciencia de la Patafísica dedicada al "estudio de las soluciones imaginarias y las leyes que regulan las excepciones", fué posteriormente seguida p0or Max Ernst o Joan Miró entre otros. Sin ánimo de ingresar en categorías académicas, más bien, con la intención de postular el imperio de la subversión y la crítica, a través de una sonrisa satírica, Jarry es uno de los primeros provocadores artísticos, que incluso, con su muerte prematura y alcohólica nos brinda una especie de acto final.
Ultimamente leo las memorias de Luis Buñuel (las recomiendo!), algo me dice que estos dos personajes se habrían llevado muy bien, o, por lo menos, seguro que se habrían tomado unos martinis secos, entre ensueños, delirios y bromas pesadas de niños visionarios, con los ojos bien abiertos hacia el mundo.

ciao, Patbell.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

De esto, en España, siempre supimos mucho, pero con la austeridad y la reciumbre propias de nuestro carácter. Ahí tenemos por ejemplo a nuestro incomparable Quevedo o mucho más cercano, el genial Valle-Inclán, cuyo lema era despreciar a los demás y no amarse a uno mismo.
En cualquier caso, es sumamente interesante esa ciencia de las cosas concretas.

Colegio Patafísico de Santiago dijo...

saludos del colegio patafisico de chile.