28 junio, 2010

EL TESORO (IX)


Me encontré con el sueño. Me detuve a hablar con él. Me quedé domirdo. Una araña tejiendo su tela me despertó. Me despertó la araña y la misma voz que por altavoz avisa de la recogida de los viejos colchenes de lana, pero que en este caso advertía de que el arco de iris acaba de salir.

Entonces, corrí, corrí sin tropezar, sin pensar, sin memoria pasada y también sin esperanza, hasta que lo vi, al lado de un árbol.

21 junio, 2010

EL MENSAJE DERECHO. Y CASI FIN

El segundo mensaje dice así:
" No temas porque el día se haya ido. Nadie ha encontrado nunca su tesoro,sin pasar la prueba de la noche en el bosque. Busca algo parecido a un club de jazz. No te será difícil. Abundan en los árboles. Pero, no lo olvides, sólo te servirá aquel en el que oigas desde fuera dos trompetas que suenen como las trompetas de alguien que ensaya en un parque las escalas y un amago de canción. No entres. Sigue recto y confía en que el amanecer devuelva la lluvia y con ella el arco de Iris. Es la hora del valor y de la fe en que también lo imposible tiene su lugar".

01 junio, 2010

DOS MENSAJES CIFRADOS. EL IZQUIERDO (VII)


Al descender de la barca,
en la playa me encontré con dos mensajes clavados en dos postes clavados por el mismo impulso en la arena -uno a la derecha y el otro a la izquierda- por medio de los cuales yo debía pasar.
Alguien, me dejaba las claves.
Otro alguien también dejaba claves a otro que aún no había llegado.

Sabía que sólo un juego de ellas me conduciría y que el otro me extraviaría sin remedio. Y lo mismo le sucedería al que llegara después de mí si yo me equivocaba.

Debía de acertar con mi elección. Algo más que un error estaba en juego.
Un tesoro.
Una muerte.

Como nada en su forma externa ni en su disposición, ni siquiera en el modo en que el clavo los atravesava, aparentemente sin provocar dolor, indicaba cuál de los dos alfabetos -el izquierdo o el derecho- estaba reservado para mí, cuál de los dos alguien me había dejado, me decidí a leer ambos.

Miré a ambos lados.
Nadie.
Miré a ambos lados.
Me decidí por el izquierdo.
Dice así:
"Id a cierto sitio y haced ciertos tratos con ciertas personas del modo que parezca oportuno"
Quizás.
Sin duda se trata de claves cifradas. Pero creo que no son para mí.
Huelen a sicario, a monarca soberbio y a Papa humillado.

Miro a ambos lados.
Nadie.
Desclavo la otra.
Dice así: