14 junio, 2007

ES HORA DE PARTIR


A vosotros, los de corazón limpio y alma generosa, a vosotros los que estáis vivos, amigos, amigos, yo os saludo.
Ciudadanos de Metacosmia, un día de hace tiempo, decidimos abandonar un mundo que se arrastraba infestado por el egoísmo, un mundo en el que el "óxido se había posado en la lengua de los hombres", nuestros semejantes, y había dejado en ella un sabor de ausencias, de pretextos y de distancias, un mundo en el que la vida apenas tenía ya fuerzas para sostenerse, en el que ya no había brazos con valor y fuerza suficiente para empuñar La Espada, en el que nadie creía ya en los milagros.
Embarcamos en nuestra nave interlestelar con el empeño de buscar un espacio en el que vivir a salvo de las mentiras, a salvo de las palabras, con el empeño de encontrar.
Así llegamos a Metacosmia, creímos en Metacosmia, creamos Metacosmia: nuestra utopía, en la que las lagrímas alcanzaron la luz y la misión de nuestros ojos ya no fue nunca llorar, sino ver.
Pero las palabras, infatigables como una araña hambrienta, las palabras, muñidoras de equívocos y trampas, las palabras, fabricadoras de ídolos y dioses falsos, las palabras, asperas maromas o lazos de seda que atan arbitrariamente a deseos y a personas por el mero placer de la confusión, las palabras, aventadoras de humo y de vacío, las palabras, amigos, han dado con nosotros y ya nos atacan.
Puedo oírlas rollendo la madera de los tiernos brotes, chupando nuestra savia nueva.
Legiones de palabras, zapadoras, cavan túneles para derrumbar los muros de nuestra ciudad que nunca tuvo murallas. Batallones de palabras, arietes afilados, golpean para echar a bajo nuestras puertas, las mismas que por estar siempre abiertas nunca fueron necesarias. Escuadrones de palabras, traidoras, evenenan los pozos y meten estropajos en nuestras gargantas.
Es hora de partir.
Ha llegado la hora.
Es hora de partir en busca de otro lugar que sea inaccesible a las palabras. Me llevo conmigo mi utopía, que no es otra que la de llegar a vivir estando vivo, en un ámbito en el que el amor no sea una palabra, vana, en el que la muerte no sea una palabra, oscura, en el que la alegría, no sea una palabra, efímera.
Os dejo con el convencimiento de que un día, quizas con otro cuerpo u otra dimensión o a la vuelta de un sueño planetario, lo encontraré. Lo encontraré porque tengo el valor para continuar la búsqueda.

¡Qué nos os falte el valor!
Hasta siempre
Oscar M. Prieto
Pd: Seguro que volvemos a vernos en otro amanecer.

11 junio, 2007

FRENOLOGIA


Dicen que a partir de los cuarenta uno tiene la cara que se merece. Yo creo más bien que uno acaba teniendo la cara del animal que le rumia dentro. Por ejemplo, no os habéis fijado en que los grandes y poderosos empresarios acaban teniendo cara de tortuga. Si existe una relación entre las cualidades de unos y otros es otra cuestión. Probablemente y según los divertidos estudios de la frenología (si alguien encuentra un cráneo con las señales de la frenología que me lo envíe por favor) si que existe una relación entre la morfología del cráneo y las cualidades "espirituales" o psicológicas del ser humano.


La frenología establece desde las más anecdóticas relaciones entre la amplitud de la frente y la inteligencia!! que hacen revolverse en sus asientos científicos a las grandes eminencias, hasta inquietantes correlaciones entre el tamaño y abultamiento de la parte baja de la nuca y los instintos asesinos y violentos.


Lo que en un principio parecía esoterismo y superstición se ha ido matizando y profundizando con el tiempo, y hoy en día la fisionomía y los estudios sobre su relación con el carácter y el temperamento son objeto de estudio e interés en diversos ámbitos...


Ojos muy separados: extroversión, impulsividad. Muy juntos: introversión, capacidad de análisis. Frente huidiza: sufrimiento interiorizado. Mentón pronunciado: tenazidad, imposición...etc.


Seguramente con el tiempo llegaremos a la "culología", porque sí, es en el culo en dónde se refleja de forma más innata e inconsciente nuestra personalidad, porque no lo vemos nosotros y lo ven los demás!! porque resume nuestro aposentamiento en el mundo, nuestra sensualidad y nuestros miedos, nuestra vitalidad o nuestra indolencia, nuestra rabia o nuestra perpetua búsqueda de cobijo. Porque el culo es la cara oculta...

POr sus culos los conoceréis...

ciao, Patbell.


04 junio, 2007

REALIDAD O FICCIÓN

Entrar en el debate sobre si es la ficción la que copia de la realidad o, por contra, es la realidad la que encuentra inspiración en la ficción, resultaría demasiado fatigoso para estas tempuraturas, además de la excesiva transpiración que exigiría.
Si quisiéramos entretenernos con un debate realmente jugoso, mucho mejor sería el que se centra en la propia cuestión ontológica, esto es, la que se pregunta por la auténtica realidad de la realidad o, dicho de otro modo: ¿qué es más real, la realidad o la ficción? La respuesta más discreta en mi opinión es que depende, pues habrá realidades muy poco consistentes, casi fantasmas o apenas sombras y habra ficciones con la una rotundidad de ser semejante a un muro de hormigón.
Pongamos un ejemplo tan sólo ¿Quién es más real, Ulises o toda la lista de los Reyes godos? Esta pregunta ya se la hace Unamuno en Niebla o, mejor dicho, Augusto Perez, protagonista de dicha nivola, le pregunta al mismo Unamuno sobre quién es más real el simpar Don Quijote, personaje de novela, o el genial Miguel de Cervantes, autor y creador del mismo.
Augusto Pérez tiene clara la respuesta y Unamuno la teme, teme que no seamos nada y que este mundo no sea más que una ilusión. Pero eso ya es otro tema. En realidad esto era la introducción para lo que iba a escribir hoy, pero en vista de que me he alargado demasiado, lo dejaré para el próximo, que comenzaré 'in media res' para no perderme en introducciones.
Por cierto, leo en primera página en un periódico, a cinco columnas: "Los alergólogos amenazan con una segunda primavera" ¿Habéis leído alguna vez titular más sobrecogedor e impactante?
Salud
Oscar M. Prieto
Pd: ¿Qué frutas son más reales, estas de Cezanne o las de los tristes fruteros de vuestras casas?