04 diciembre, 2006

SANTA BARBARA


"Santa Bárbara bendita. Tralaralará, tralará. Santa Bárbara bendita. Tralaralará, tralará. Patrona de los mineros miray, miray Marusiña, miray miray como vengo yo"
Diciembre llega con un abrigo de nieblas, de lluvia y frío. Y también con la muerte.

Paseo por el campus, luego de mañana, antes de que llegue alguien, sólo con las liebres y los lebratillos. Paseo y canto. Primero bajo y luego, poco a poco , emocionado alzando la voz. No hay nadie, pero no me importaría si lo hubiera. Me gusta la canción. Siempre me gustó.

"Traigo la cabeza rota. Tralaralará, tralará. Traigo la cabeza rota. Tralaralará, tralará"
Yo llegué a Madrid para estudiar Minas (¡Qué cosas verdad! ¡Mira que acabar después en Filosofía!) y el 4 de diciembre estaba señalado en rojo en el calendario: Santa Barbara. Señalado en rojo y en ruido y en polvora. Menudo jaleo se preparaba la mañana de hoy en la Escuela. Entraba la gente con petardos, pero petardos petardos, de los buenos, de los marrones y mecha negra, entraba la gente, digo, con petardos en las clases y allí no se respetaba nada y todos a saltar malditos y gritos y me hago una idea de los hoteles de Bagdad o de Beirut, pero cambiando la sangre por alcohol, el llanto por la carcajada, la tragedia por la ebriedad.
Según están las cosas hoy temo que hayan cambiado el nombre a la patrona, que lo hayan sustituido, por ejemplo por: día de solidaridad y paz minera e ingeniera. Por lo de no ofender sensibilidades, por lo del laicismo rancio, por la estupidez militante y bárbara, aunque no santa.
Temo también que hayan prohibido los petardos. ¿El motivo que hayan aducido para ello? No os extrañe que sea el de la
Alianza de Civilizaciones y la paz, tan reñida con el ruido de cartuchos y el olor a dinamita.
En fin, este es el sino de los tiempos, el paludismo intelectual.
Leo con media sonrisa, que Japón enviará inspectores por todo el mundo para asegurarse de que los restaurantes japoneses que comienzan a sustituir a chinos y coreanos, sean realmente japoneses y no chinos o coreanos camuflados, en los que el sushi esté cocinado como manda la tradición.
Un país curioso Japón. Supongo.

"De sangre de un compañero. Miray, miray Marusiña, miray, mira como vengo yo"
Salud.
Oscar M. Prieto

8 comentarios:

Anónimo dijo...

NO vendría mal que alguien revisara lo de los petardos (y las petardas)...que sólo queden los de pólvora!!
besos explosivos.

Anónimo dijo...

otra versión:
eche un andar muidiño miudiño miudiño
o que eu traio.
que traio unha borracheira..
de viño, que auga non bebo mira!
mira maruxiña mira, mira como eu veñooooooo!!!!!!

Anónimo dijo...

Todo esto de los petardos nos parece muy bien, o muy mal, según se mira.
Lo que queremos es que escriba Pat Bel que es mucho más interesante.

Anónimo dijo...

uy evangelina cómo te pones!
eres siempre así o es que los lunes no te soportas?

Anónimo dijo...

Yo por lo menos pongo mi nombre.
Y hablando de petardas, ayer echaron de OT a la peor, a Vanessa, así reviente.

Anónimo dijo...

evangelina a ver si te enteras!! sólo leemos el blog por Oscar, Patbel es como el relleno del pavo que lo quitas y te comes lo otro!!

Anónimo dijo...

Veo que andas pobre de paladar, porque lo bueno del pavo es el relleno. Pero bueno qué voy a decir a alguien que no ha comido jamón york en la vida.

Anónimo dijo...

soy mineroooo...!!! las minas, la filosofía y la copla no andan tan lejos, pero nos alegramos de ese cambio de rumbo que va a dinamitar las máscaras del mundo!!