12 mayo, 2012

EL CALENDARIO



Nunca lograré comprender del todo este afán por vivir, por mantenerse como especie, por prolongar la historia de esta aventura humana. 
Quizás la respuesta esté en el miedo. 
Sea como sea, unos científicos -en su nuevo papel de sacerdotes- fueron enviados a las ruinas de Xultún, igual que mendigos a los basureros, en busca de algo más antiguo, para contrarrestar, algo así como una carta más alta para hacer frente al envite. Su proyecto era perverso, que los mayas contradijeran a los propios mayas. (Sin duda conocían los argumentos de los sofistas y las trampas de la argumentación retórica).
Dieron con un calendario más antiguo. El fin del mundo no llegaría en el año 2012. Allí estaba escrito. No hacía falta más.
Así lo dejaron.
Yo me pregunto si no vieron o no quisieron hacer publicidad de la inscripción que también encontraron en esas mismas ruinas. No sería el 2012 la última fecha de la especie humana porque el mundo ya había sido destruido antes.
Esto es sólo un sueño.
Como la luz de un sol que aún nos llega y conforta nuestras sonrosadas mejillas, pero que sin embargo hace ya miles de años luz que desapareció para volverse fría, fría, fría.

1 comentario:

Anónimo dijo...

El 2012, un año lleno de incognitas y preguntas sin respuesta... un momento en la historia puntual de la humanidad, un enigma.

Aunque algo si está claro, mientras respires y el oxígeno circule por tu cuerpo, estás vivo y es necesario recordar que tu vida es tuya, y aunque se empeñen en decirnos que las circunstancias son aciagas, crisis económica, problemas familiares y personales... Siempre que respires significa que estas vivo y que es importante luchar por lo que quieres y amas.

Gracias, saludos.